Pasarela LIV Catwalk – Segunda Edición
Sábado. Me desperté a las 8:30 y me apure en vestirme puesto que se suponía que me reuniría con alguien. Cuando terminamos con nuestros negocios me tomé algo de cafeína y me dirigí hacia el gimnasio.
El entrenamiento fue bueno. Por primera vez en tres años hice de nueva cuenta peso muerto. Compré algunos ganchos de levantamiento puesto que mi mano izquierda aún está fregada pero la cosa metálica seguía doblándose. Al final, en realidad no se sentía como que me estuviera sermoneando un montón. Hice más ejercicios que los que usualmente hago y me sentí como si pudiera seguir pero me di cuenta que no sirve de mucho exagerar tampoco puesto que no tendré mucho descanso esta noche debido a la pasarela que estoy programado para hacer con Vicino models en LIV en Playa del Carmen.
En la tarde fui a hacerme un corte de cabello. Luego probé un nuevo restaurante brasileño que abrió cerca que sirve cortes limitados de carne. Por supuesto que me llené hasta el punto de explotar.
Para las 10 p.m. estaba en camino hacia LIV. Mi ex vecino Ernesto también se integró. Debido a que se encendió la luz de revisar motor en mi carro usamos el suyo. La pasarela estaba agendada para la 1 pero como es usual las cosas se retrasaron y no salimos sino hasta las 2:20 am. Fue muy divertido. Parecía que habían o más mujeres que hombres en el club o simplemente hacían mucho más ruido. Es una bonita sensación ver que todo el club grita por ti, me podría acostumbrar a ello 🙂
Salimos tres veces y para la ronda final consideré hacer una voltereta hacia atrás pero nuevamente sin zapatos sobre un piso de madera en un espacio muy pequeño el riesgo de que algo salga mal era un poco mayor que lo usual y si algo realmente sale mal entonces todo el club lo atestiguará así que decidí que haría algunos saltos de práctica la siguiente vez mientras el club aún este vacío. Se llena realmente tarde. No había un alma cuando llegamos a las 11:30 y para las 2 estaba bastante lleno.
Luego de terminar la pasarela estaba tan cansado que todo parecía borroso y puesto que aun tenía que manejar una hora para regresar decidí que la fiesta también quedaría para la siguiente vez.
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